003.09 LA REALIDAD DE LA VERDAD

 LA REALIDAD Y LA VERDAD

Lo real ES, lo no real tiene dos condiciones o es idea o es mentira. Las ideas están y son creadas por una mente que "piensa" y el pensar requiere de un cerebro o de un espíritu que lo realiza. Ademas, mediante las ideas y usando lo real de las cosas, se pueden unir de formas diferentes haciendo seres que no existían antes en lo real material; pero esos seres son mutables, como todo lo compuesto por materia y duran solamente un número determinado de años. Esta duración es más o menos prolongada dependiendo del uso y cuidado que las criaturas tengan con las formas creadas por ellos con las cosas reales. Así mismo las ideas, tienen realidad mental, trasmitida o escrita de acuerdo a lo que el individuo que "piensa", puede o no, trasmitir su "pensar". Luego lo real es más extenso que lo propiamente material creado como tal. Los seres pueden y de hecho lo hacen, "producir" formas diferente a lo real. 

Cuando hablamos de lo "real", en primer término, se habla de aquello que la llamada "naturaleza" ha reunido en variedades de materia, mediante las fuerzas mismas de las leyes naturales, para hacer surgir formas de una variedad y posibilidad inconcebibles. Incluso la vida misma, al menos por lo que sabemos en nuestro planeta, fue obra, aún misteriosa, de esas mismas leyes. Todo lo dicho es bien conocido; pero es necesario recalcarlo, pues un racionalismo a ultranza y mal comprendido ha pretendido poner a este instrumento de la inteligencia humana por encima de aquello de lo cual procede. La vida, la inteligencia y la razón, son elementos que no estaban cuando la primera manifestación de la materia empezó a dar sus pasos por el Universo. Así como muchos de los elementos materiales que se formaron después de millones de años de "evolución".

De lo dicho anteriormente, se pueden deducir dos preguntas:

1) ¿Estaban los elementos que después se formaron comprendidos en la materia primigenia en su misma dinámica de creación?

2) ¿O Un ser que sobrepasa nuestra comprensión racional, interviniendo en la materia que apareció desde la nada, por su poder, realiza de una manera desconocida los procesos necesarios para que surjan todos las demás formas y entidades que hoy conocemos?

La primera de las preguntas nos lleva a poner el conocimiento que tenemos, racionalmente, de la realidad, por encima de la realidad de la cual somos, en parte, producto. Lo cual es un absurdo bien claro.
En la segunda pregunta, entramos en al nivel de la fe o la racionalidad de los primeros principios. Lo primero es producto de una revelación personal y por lo tanto de comprobación no científica. Lo segundo es consecuencia lógica de argumentos racionales sacados de una observación del universo y las cosas que están y son ante nuestros sentidos. Dada la preeminencia que lo científico tiene en nuestro tiempo a causa de una premisa racionalista, que se puede definir como: o lo entendemos a nuestro nivel racional o no es verdad o podemos dudar de ello; las opiniones de razón general, bien pensadas y observadas no gozan del predominio que debieran tener. Por esa razón: algo se demuestra a nivel científico o no es válido; pero esto no quiere decir que no es, sino que no lo podemos llevar a la validación que nos proporcionan nuestros sentidos. Esto último no es una prueba negativa de una hipótesis, sino la afirmación de que lo único real y verdadero para nosotros es lo que la ciencia puede constatar y ello no es posible admitirlo, estando, como estamos, en un universo que no se conoce científicamente sino en una ínfima parte.